Irresponsables son pequeñas historias de personas. Los intérpretes se presentan sin complejos, en sus aciertos y sus dudas. Se mueven a través de sus gustos, del deseo, del juego, de la gula, de la vanidad…
Es un trabajo planteado desde una elegancia rotunda, la que da el saber estar en cada momento, la que da la experiencia. Son personas que asumen su lugar y juegan con él.
La pieza está bañada de muchos colores, y acorde a lo que sugiere el título, es frescura y humor. Las escenas se encadenan en un ir y venir de presentaciones y de acciones, desde lo más teatral a la danza.
D. Abreu